22 Marzo 2024
Durante muchos años, los tratamientos médico estéticos con ácido hialurónico se han centrado en aportar volumen a labios y mejillas. La parte inferior del rostro casi ha pasado desapercibida. Sin embargo, en los últimos años, esta parte de nuestro rostro ha ganado más atención. Y es que los signos de envejecimiento pueden ser muy pronunciados en la parte inferior de la cara, sobre todo en la línea de la mandíbula.
Los avances en los tratamientos han generado nuevas oportunidades para abordar la forma facial sin cirugía (1). Una mandíbula poco definida ahora se puede tratar con rellenos de ácido hialurónico para ayudarte a lucir más joven y mantener tu belleza natural.
Hay varias razones por las que la línea de la mandíbula se ha convertido en un foco de atención:
En primer lugar, una mandíbula afilada es un ideal de belleza. Hoy en día, muchos jóvenes desean tratarse la zona mandibular a pesar de que no tienen ningún signo de envejecimiento, en algunos casos porque buscan una mejora de su perfil. Se trata más de afinar su apariencia y resaltar todo su potencial de belleza.
En segundo lugar, una mandíbula afilada se asocia con una apariencia juvenil. Una mandíbula menos definida o caída se relaciona con la edad avanzada. Con el envejecimiento, la línea de la mandíbula a menudo pierde su nitidez, debido a la resorción ósea y a la pérdida de volumen en la parte superior de la cara (2).
El efecto más típico que tiene el envejecimiento en la línea de la mandíbula es que con el tiempo obtenemos una línea de la mandíbula menos definida o caída. Una razón es la resorción ósea, como mencionamos anteriormente. Los huesos del rostro dan soporte y determinan la forma del rostro. Con el envejecimiento aumenta la resorción ósea. (2). Esto normalmente es visible en la línea de la mandíbula, ya que el ángulo de la línea de la mandíbula (o la parte posterior de la mandíbula inferior) se vuelve menos definido.
La papada es otra causa de la mandíbula caída. La papada se forma principalmente a causa de la gravedad y la pérdida de firmeza y elasticidad en la piel (4). En las mejillas contamos con unas “almohadillas” de grasa que descienden hasta la parte inferior de la cara y caen por debajo de la línea de la mandíbula (5). Esto, junto a la resorción ósea, el resultado es una línea mandíbular caída que ha perdido su nitidez (2).
Los avances en los tratamientos médico estéticos permiten tratar la línea de la mandíbula. Esto se puede conseguir por medio de tratamientos de ácido hialurónico mínimamente invasivos.
La papada es un problema más complejo, pero ahora incluso se puede corregir sin cirugía en muchos casos (1). Los tratamientos de ácido hialurónico con un gel más firme pueden servir como rellenos en la línea de la mandíbula. Al añadir también estructura y volumen en las sienes o los pómulos, se puede corregir la papada y el paciente puede recuperar una apariencia más juvenil.
Si estás pensando en un tratamiento médico estético para tu mandíbula, es interesante saber que existen diferencias entre hombres y mujeres en cuanto a la forma de la mandíbula. Una mandíbula afilada se considera atractiva tanto en hombres como en mujeres y da la apariencia de juventud. Sin embargo, los hombres en general tienen rostros más angulosos, mientras que las mujeres tienen rasgos faciales más suaves. Los hombres también tienen mandíbulas y barbillas más anchas, mientras que las mujeres suelen tener una cara en forma de corazón (6).
Desde Galderma recomendamos acudir a un profesional médico que te recomendará el tratamiento más adecuado para tu caso.